Le habían atado plomo en los tobillos para que no se dejase llevar por su imaginación,para que no subiera a sus mundos de fantasía
Porque si no, se inventaba historias y no paraba...
¡Todo el día soñando y escribiendo tonterías por dónde podía!
Tampoco se caminaba tan mal con el plomo,como en todo,uno se acostumbra,aunque a veces...
A veces, se iba a su parque preferido, y una vez allí..
(Sin que nadie la viera).Se desataba pacientemente el plomo de sus pies
Lo dejaba en cualquier banco verde y entonces..
Entonces, sonreía de verdad: Cuando digo de verdad, es que jamás he visto una sonrisa tán larga como esa.(Yo una vez le conté todos los dientes).
Y creeme, aquella sonrisa podía recorrer kilómetros, unir paises.
Sin lugar a dudas,cuando esto sucedía ella era la persona más feliz de todo el mundo.
Fantaseaba entre todos aquellos árboles y pájaros
Los pájaros se metían en su cabeza
Y con su cabeza llena de pájaros y toda aquella fantasía
Escribía en su cuaderno miles y miles de palabras
Que sólo ella entendía